La Dirección General de Rentas encuentra su génesis en la Ley Nº 559 de fecha 15 de diciembre de 1887, a través de la cual se crea la Receptoría General de Rentas de la Provincia, que tenía a su cargo las funciones de cobro de los impuestos de la Provincia y que anteriormente se encontraban concentradas en la Contaduría General.
Posteriormente, en 1892, la ley antes citada fue derogada por la Ley Nº 631, promulgada en fecha 10 de diciembre de 1892, creando la Dirección General de Rentas de la Provincia, denominación vigente hasta el día de la fecha, quedando este Organismo a cargo de la aplicación, percepción y fiscalización de los tributos provinciales.